Filosofía para pensar la psicoterapia

Judith Morán

Los trazos de Paul Cézanne en Una Olympia moderna fueron el pretexto que usó Virginia Moreira en la conferencia "Del enfoque centrado en la persona a la clínica del mundo vivido" para explicar el concepto "mundo de vida", que viene de la palabra alemana lebenswelt, que se apropió la psicoterapia.

La doctora en Psicología Clínica por la Pontificia Universidad Católica de São Paulo, explicó que el mundo vivido, como lo describe el filósofo Maurice Merleau-Ponty, es como una pintura de (Paul) Cézanne, no es una fotografía con formas definidas.

Existen múltiples contornos, movimiento, perspectivas diferentes, señaló la también académica, quien se desempeña como profesora de tiempo completo en el Programa de Posgrado en Psicología, en la Universidad de Fortaleza, Brasil.

"Merleau-Ponty utiliza la pintura de Cézanne para pensar su filosofía. Nosotros hemos utilizado la filosofía y la pintura para pensar la clínica y la psicoterapia", dijo el pasado 6 de abril, en el Auditorio Pedro Arrupe, SJ.

En la clínica, detalló Moreira, esta fenomenología filosófica entiende al paciente como un ser atravesado por el mundo.

"No es que el mundo lo esté influenciando, sino que el mundo lo constituye, que es su propia historia y su propia posibilidad de transformación", añadió.

De esta manera en el proceso psicoterapéutico se construye el autoconocimiento. Es un camino en el que el paciente y el psicoterapeuta van juntos.

"Como psicoterapeuta, cuanto intento comprender el significado del lebenswelt busco captar esta mezcla de lo vivido que es, simultáneamente, tanto subjetivo como objetivo, consciente e inconsciente, tanto individual como social", señaló Moreira, autora de siete libros y de más de 80 artículos.

Moreira fue invitada al ITESO en el marco del 40 aniversario de la Maestría en Desarrollo Humano, el primer posgrado de esta universidad.

Además de la conferencia, impartió el taller "Fundamentos para la clínica del mundo vivido".